8. Ejercicios resueltos
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Imagen 1. Autora: Aheram. Licencia CC |
"El lector no debe inquietarse por el hecho de que un poeta no le guste nada y otro le guste mucho, aunque el primero ocupe tres páginas del manual de historia de la literatura y el segundo solo unos pocos renglones. Tampoco debe preocuparse porque en la obra de un poeta le entusiasmen unos poemas y lo dejen frío los demás. Ocurre igual con la música: cuando, hace años, se puso de moda Gustav Mahler, todo melómano debía declarar su admiración por el músico vienés —le gustara o no— porque no admirarlo era algo así como no entender nada de música y estaba muy mal visto. La poesía, desde hace mucho tiempo, no forma parte de la moda (o al menos no a niveles públicamente apreciables), pero sí es posible que con relación a ella el lector se encuentre alguna vez en una situación semejante a la del melómano.
Hay poesía —como hay música— para todos los gustos, y no tenemos por qué imponer a un paladar —al nuestro— sabores que rechaza claramente. Lo importante es encontrar la poesía que nuestro paladar acoge con gusto; la Historia de Literatura escrita en español (entre España y Latinoamérica) es una despensa fabulosa, y si le añadimos las buenas traducciones de poetas de otras lenguas nuestras —catalana, gallega y vasca— o de lenguas extranjeras, podemos decir que hay reservas para toda la vida y para todos los gustos.
Pero es inevitable buscar esa poesía apropiada al gusto de cada cual. Quien no lee poesía, evidentemente, no encontrará nunca la que le gusta. El lector también debe ser tolerante consigo mismo hasta el punto de no rechazar para siempre a un poeta que hoy no le interesa. Será difícil que deje de interesarle el que hoy le parece extraordinario, pero puede ser que en el futuro le gusten otros: las lecturas que haga a partir de hoy, las relaciones que mantenga, las experiencias que adquiera o los estudios que realice —aunque estén muy alejados de la literatura— le irán modificando y diversificando su forma de pensar y de sentir, y quizás añadan a su lectura elementos de captación que hoy no tiene o no necesita. Así, es muy posible que a los quince años nos guste mucho Bécquer o Juan Ramón Jiménez y no encontremos nada en Vicente Aleixandre o en César Vallejo. Pero no hay que decir nunca ‘de esa poesía no beberé’: diez años después Aleixandre puede sonar, de pronto, muy cerca de nuestra sensibilidad, o podemos abandonar una parte de la obra de J. R. Jiménez para fijarnos más en otra."
Pedro Provencio: Guía de lectura de la poesía española contemporánea (1939-1989)
a) Haz un resumen del texto.
b) ¿Compartes tú la opinión del autor del texto de que una gran mayoría de la gente se deja llevar en los gustos por la moda? Argumenta tu respuesta relacionándola con las ideas expuestas en el texto.
c) En el texto se habla del poeta Vicente Aleixandre, quien escribió la mayor parte de su obra a partir del final de la Guerra Civil española. Con respecto a esto, establece la relación de este escritor con el contexto cultural de "La poesía española desde la Posguerra hasta finales de los años 60".
a) Indica qué clase de texto es el que se ha propuesto para analizar.
b) Explica el significado de las palabras siguientes y ponga un ejemplo para cada una de ellas: captación, inquietarse, apreciables, experiencias.
c) Realiza un análisis sintáctico comentado del siguiente enunciado extraído del texto: "El lector no debe inquietarse por el hecho de que un poeta no le guste nada y otro le guste mucho". Es conveniente que insertes un esquema claro de la estructura y funciones de todo el enunciado.
El lector no debe inquietarse por el hecho de que un poeta no le guste nada y otro le guste mucho.