Lengua oral (Conversación relajada)

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La lengua oral se caracteriza por:

• El empleo del canal auditivo.
• El apoyo en el lenguaje no verbal (gestos, expresiones, miradas, posturas...).
• Es un acto perecedero, efímero; es decir, no está destinado a mantenerse en el tiempo, aunque actualmente, gracias a los avances técnicos, pueda quedar registrado.
• La situación en la que se produce es fundamental para determinar el uso de unas u otras expresiones o cuidar, en mayor o menor medida, el lenguaje, la postura, etcétera.
• Es una comunicación  que suele ser bilateral, puesto que los interlocutores pueden interactuar en la misma, salvo en los casos en los que esto no sea posible, como una conferencia, un informativo televisivo o radiofónico, etc.

  Una compañera de clase ha invitado a George a salir esta noche a una discoteca. Ante la negativa del chico alegando que tenía muchas tareas por hacer, ella le ha dicho que es un soso.

Imagen de elaboración propia

• La entonación: Si oyes una frase del tipo ¡Menuda alegría le has dado!, la entonación será la que te oriente sobre su verdadero contenido: alegría, enfado, ironía, etcétera.
• La mayor o menor intensidad o acento. Puedes comprobar cómo en muchas ocasiones, cuando hablamos, ponemos especial énfasis en la pronunciación de una determinada sílaba o palabra porque es esa en concreto la que queremos destacar: He dicho que lo cojas tú.
• El timbre de voz.

Tú también puedes tener en cuenta estos consejos. Comprobarás cómo tu lenguaje puede ser mucho más expresivo.

Otras características de la lengua oral.

El lenguaje oral tiene, por tanto, ciertas características que lo diferencian del escrito. Compara, por ejemplo, estos dos textos:

Texto 1 Esto... estuvimos en casa de este, de Mario, estuvimos en su casa toda la tarde... Sus padres no estaban en casa, así que... eso, que nos quedamos toda la tarde allí.

 

Texto 2 Estuvimos en casa de Mario, cuyos padres no se encontraban allí, y por eso nos quedamos toda la tarde.

 

Ambos textos comunican un mensaje similar. Sin embargo, en los mensajes orales encontramos características como las siguientes:

• Incorrecciones
• Frases inacabadas
• Repeticiones
• Pobreza de vocabulario, o empleo de muletillas.

Todas estas características son propias de la lengua oral, ya que cuando hablamos vamos pensando sobre la marcha aquello que queremos decir y es normal que se produzcan rectificaciones o reformulaciones sobre una misma idea. Cuando escribimos sucede algo similar, pero la diferencia es que habitualmente en el lenguaje escrito se presenta el mensaje acabado (sin tachaduras, digamos). Ten esto muy presente, pues cuando tengas que escribir un texto formal (o una tarea de las nuestras) sería un error expresarse con las características propias de la lengua oral. Por eso te pedimos que revises y corrijas tus propios escritos.

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Cuando hablamos, empleamos la lengua con distintos propósitos, que nos permiten hablar de géneros orales:

1. La más habitual, de uso diario en cualquier comunidad, es la conversación, en la que dos o más interlocutores intercambian sus mensajes sin que exista un orden de intervención y sin haber un tema preestablecido.
2. Si los participantes se reúnen de manera habitual con el propósito de hablar sobre un tema que no han escogido previamente, se establece una tertulia. Se trata de una reunión informal, constituida por personas que se conocen y que intervienen en ella repartiéndose los turnos de palabra sin orden fijo.
3. Si se trata de exponer una opinión personal y argumentarla frente a la de otras personas, nos encontramos ante un debate. En él, es necesaria la presencia de un moderador que es quien plantea el tema que se va a tratar, establece los turnos de palabra, planifica el tiempo que se le concede a cada participante y acaba realizando un resumen final de los asuntos debatidos.
4. En el coloquio, se reúne un grupo de asistentes con el propósito de formular sus preguntas a uno o varios especialistas en el tema del que se vaya a hablar, dirigidos también por un moderador.
5. Cuando queremos obtener información sobre una persona (datos personales, aficiones, opiniones, etcétera) lo hacemos mediante la entrevista.

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Además de estos, existen otros géneros orales en los que solo interviene una persona; es decir, son monologados, por lo que son unidireccionales. Generalmente, se trata en ellos de temas que han sido previamente seleccionados y preparados y que son expuestos con la ayuda de un guión.

Es el caso de:

• La conferencia (exposición de ideas sobre un tema determinado ante un público).
• El mitin (discurso sobre temas sociales y políticos).
• El sermón (temas de carácter religioso).
• La arenga (discurso militar).