1.3. El lenguaje literario
Desde este punto de vista, el lenguaje literario supone una desviación de los usos esperables de la lengua corriente, tanto en su forma como en su contenido, lo cual aporta mayor información al mensaje por lo sorpresivo que puede llegar a ser.
Por ejemplo, los versos de Lorca:
"La piedra es una frente donde los sueños gimen
sin tener agua curva ni cipreses helados."
nos llaman la atención por incomprensibles. Pero en una lectura más atenta nos aporta la información denotativa oportuna además de los aspectos simbólicos y metafóricos que encierra. ¿Quién no identifica la "piedra" con la falta de sentimiento, de vida; la dureza, la frialdad...? ¿El "agua" con la vida y los "cipreses" con la muerte, por ser el árbol propio de los cementerios?
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Como ves, las desviaciones conllevan un cierto nivel de sorpresa, por lo que —al ser más o menos imprevisibles— aportan más información.
Otras características de la lengua literaria son:
- Su carácter creativo, estético y sin una finalidad práctica inmediata.
- Es connotativo: tiene una gran carga emotiva y nos sugiere distintos contenidos
- De ahí que concentre mucho contenido en textos relativamente cortos. Toma como ejemplo este brevísimo relato, que ya conoces de unidades anteriores, del escritor de Guatemala, Augusto Monterroso, considerado como uno de los grandes narradores del siglo XX: "Cuando despertó, el dinosaurio todavía estaba allí". Una sola oración sirve para recrear una historia.
- Esto provoca que cada receptor pueda aportar y enriquecer el significado final del texto. Es decir, que el texto es polisémico y provoca lecturas plurales.
- Busca la innovación y la renovación de las formas y los contenidos literarios. Esto es: quiere ser ante todo original.
Banco de palabras: connotación, finalidad práctica, recursos estilísticos, renovación lingüística.
La búsqueda de la originalidad lleva al autor a la
en su obra.El carácter artístico de la obra literaria se refleja en la falta de
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